La carne de pollo está entre las preferidas de todo el mundo, gracias a su suave y agradable sabor, que la hace perfecta para múltiples elaboraciones. Hoy en Carnicería Félix Gonzalo traemos una deliciosa receta de albóndigas de pollo en salsa, para repetir a menudo en casa.

Ingredientes para preparar albóndigas de pollo en salsa

Para preparar esta receta de albóndigas de pollo en salsa se necesitan los siguientes ingredientes:

  • 500 g de carne de pollo de Carnicería Félix Gonzalo (puede ser solo pechuga de pollo o mezclada con contramuslos)
  • 2 huevos grandes
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • perejil
  • 1 rebanada de pan de molde
  • leche
  • sal
  • pimienta negra recién molida
  • 2 zanahorias medianas
  • 1 vaso de vino blanco
  • caldo de pollo o de carne
  • 1 hoja de laurel
  • 1 puñado de guisantes (opcional)
  • harina (opcional)
  • aceite de oliva virgen extra

Paso a paso de la receta de albóndigas de pollo en salsa

Preparando las albóndigas

El primer paso para preparar estas albóndigas de pollo en salsa consiste en poner a punto la carne. Para ello, en caso de no traerla picada de la carnicería, se debe picar la carne de pollo en casa. Nuestro consejo es mezclar carne de pechuga con contramuslos para que quede más jugosa, ya que la pechuga es muy magra. Una vez picada, se dispone en un cuenco amplio, salpimentándola y reservándola.

Por un lado, se pela un diente de ajo y se maja en un mortero, añadiéndole unas hojas de perejil. Cuando estén bien machacados, se agrega un par de cucharadas de leche y un huevo batido y se mezcla todo bien. Por otro lado, se moja la miga de la rebanada de pan de molde en leche y se empapa bien. Esto dará jugosidad a las albóndigas.

A continuación, se añade el contenido del mortero junto la miga de pan a la carne picada y se mezcla minuciosamente. Después, se deja reposar durante 30-45 minutos bien tapado en la nevera.

Cuando la masa haya reposado, se forma una albóndiga y se fríe en abundante aceite de oliva. A continuación, se prueba para ver el punto de sal y pimienta, rectificando si es necesario. Una vez la masa esté a nuestro gusto, se forman y fríen todas las albóndigas y se reservan. Hay quienes las rebozan en harina antes de freír, pero eso ya va en gustos personales.

Preparando la salsa 

Ahora, se pela y se pica finamente el otro diente de ajo y la cebolla. En la misma cacerola donde se han frito las albóndigas, se fríen a fuego bajo, hasta que la cebolla transparente y comience a dorarse. Después, se añaden las zanahorias lavadas, peladas y troceadas en rodajas finas, sofriendo durante unos minutos. Acto seguido, se añade el vino y se sube el fuego para que evapore el alcohol.

A continuación, se incorporan las albóndigas y la hoja de laurel y se añade caldo de pollo o de carne hasta que cubra las albóndigas. No es necesario llenar la cacerola hasta arriba de caldo, basta con que cubra las albóndigas. Después, se cocinan a fuego medio durante unos 15-20 minutos

Para quienes quieran añadir los guisantes, deben hacerlo en los últimos 10 minutos del cocinado.

¡Que aproveche!