La gastronomía española está llena de recetas tradicionales que potencian los mejores ingredientes de la dieta mediterránea. Un buen ejemplo de ello es esta deliciosa receta de rabo de ternera estofado que traemos hoy en Carnicería Félix Gonzalo.
Ingredientes para la receta de rabo de ternera estofado
Para preparar este plato utilizaremos una olla rápida o súper rápida, que simplifica el proceso y ahorra tiempo. Además, se necesitan los siguientes ingredientes:
- 1,5 kg. de rabo de ternera de Carnicería Félix Gonzalo
- 2 tomates maduros
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 2 cebollas grandes
- 2 zanahorias
- medio litro de vino oloroso
- 1 litro de caldo de carne (preferiblemente de ternera)
- tomillo
- romero
- 2 hojas de laurel
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta negra recién molida
Elaboración del plato
El primer paso para preparar esta receta de rabo de ternera estofado es limpiar y trocear el rabo. Para separar los trozos del rabo es necesario buscar la articulación entre cada hueso y cortar con cuidado.
Una vez bien limpio, se salpimenta bien la carne. A continuación, se echa un chorro de aceite de oliva en la olla donde se va a preparar el guiso y se dora bien el rabo para que quede bien sellado. Una vez dorado, se retira y reserva. Mientras tanto, se lavan, pelan y trocean las verduras.
En ese mismo aceite, se añaden la verduras bien picadas (excepto el tomate) y se cocinan hasta que comience a trasparentar la cebolla. Después, se añade el tomate rallado y se cocina hasta que pierda el agua sobrante.
Ahora se incorpora el vino y se deja reducir hasta que se evapore el alcohol. Acto seguido, se introduce la carne reservada y se añaden el tomillo, el romero y el laurel. Se cubre con caldo de carne y se cierra la olla, poniéndola al máximo hasta que empiece a salir vapor.
Se baja la intensidad al medio-bajo y se cocina durante unos 40 minutos. Dependiendo de la olla puede necesitar más tiempo. Para saber si la carne está lista, se debe comprobar que se despega bien del hueso. Si no es el caso, se sigue cocinando hasta que adquiera la consistencia deseada.
En cuanto a la salsa, puede servirse tal cual o puede pasarse por la batidora. En ese caso, debe retirarse el laurel, que ya ha cumplido su función.
Servir y disfrutar, ¡que aproveche!
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